martes, 28 de abril de 2020

SÚMATE AL RETO: "10000 PASOS EN EL CONFINAMIENTO Y EN LA DESESCALADA"

¡Mantente en forma!, ¡mantente sano!: “Decálogo del buen confinado y del buen desescalado”


Reto superado de Mª Ángeles y su hijo Sergio, miembros del
grupo "Los Quemasuelas" con una dedicatoria muy especial
Unos días después de iniciar el confinamiento, mi amiga Mª Ángeles Cedillo me llamó por teléfono para proponerme un reto durante el tiempo que durara esta situación originada por la pandemia de la COVID-19. El reto, básicamente, consistía en mantenernos activos, aunque permaneciéramos en casa sin salir a la calle. Para animarnos a ello, al final de cada jornada, debíamos enviarnos los pasos registrados en un podómetro a través de un mensaje de wasap. El compromiso era hacer un mínimo de 10.000 pasos cada día andando o corriendo en un circuito interior, en el que debíamos recorrer las habitaciones, el pasillo y el salón de nuestras casas hasta alcanzar la meta. El objetivo final no era otro que evitar perder el ritmo de actividad que ya teníamos ambos antes de quedar presos en nuestras casas. Pronto a este reto se sumaron otros amigos y familiares como Sergio, José Antonio y Agustín. Al grupo de wasap formado le denominamos “Los Quemasuelas” y desde que se creó ningún miembro ha fallado un solo día (estamos hechos unos verdaderos “monstruos”).

Esta iniciativa se ha ido popularizando y se han creado nuevos grupos de wasap entre familiares, compañeros y amigos.  La Universidad de Sevilla, a través del Área de Promoción de la Salud, dependiente del Vicerrectorado de los Servicios Sociales y Comunitarios, también se sumó a esta iniciativa y lanzó una campaña similar en las redes sociales: Facebook SADUS, Facebook US, Página web del SADUS, e Instagram.

Y es que todos tenemos que ser conscientes de la importancia del ejercicio para mantener una buena salud física, emocional y social. El ejercicio físico reduce el riesgo de desarrollar sobrepeso, enfermedades cardiovasculares, algunos tipos de cáncer y fortalece el sistema inmunitario; además, mejora el estado de ánimo, disminuye el riesgo de padecer estrés, ansiedad, depresión y aumenta la autoestima, el bienestar psicológico y la autonomía personal. Junto a la alimentación y la salud emocional, es uno de los grandes pilares que mantienen nuestra salud.

El elixir de la eterna juventud, en el fondo, consiste en mantener una masa muscular adecuada a lo largo de toda nuestra vida, evitando que se pierda esta como consecuencia de la inactividad. Algunos culturistas hoy superan los 80 años y lucen unos cuerpos envidiables; asimismo, existe un número creciente de deportistas centenarios que todavía practican distintas disciplinas deportivas y nos dan ejemplo de que se puede llegar a ser muy mayor disfrutando plenamente de la vida y gozando de una excelente salud. El músculo actúa como órgano endocrino y participa en el buen funcionamiento del conjunto del organismo; la pérdida de masa muscular implica una merma en la calidad y la esperanza de vida.

Por todo ello, te animo, a ti también, a que crees tu propio grupo de wasap y que te sumes al reto junto a otros amigos. No pierdas tu forma física durante el periodo del estado de alarma, incluso..., ¡mejórala! También puedes seguir el modelo propuesto por la Universidad de Sevilla; para ello sigue los siguientes pasos y hazlo aún más divertido:

domingo, 19 de abril de 2020

SÍNCOPE REFLEJO: ALIMENTACIÓN Y OTROS CONSEJOS PARA TRATAR DE EVITARLO

Si te mareas cuando te sacan sangre o cuando permaneces mucho tiempo de pie, entonces, tienes que leer esto


El día que alcancé la mayoría de edad fui a donar sangre por primera vez al Centro Regional de Transfusión Sanguínea, ubicado en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla. A partir de ese momento ofrecí mi brazo cada tres meses de forma casi religiosa, hasta en un total de 11 ocasiones. Sin embargo, siempre terminaba de la misma manera, sufriendo una aparatosa lipotimia que, en más de una ocasión, no me permitió completar la bolsa. En la donación número 11 preocupé tanto al médico que me atendió que me prohibió tajantemente volver a donar. Por aquel entonces nadie me explicó cómo debía actuar para minimizar los efectos de los síncopes que sufría en esta y otras muchas circunstancias. Si como yo sufres este problema y te desmayas a la más mínima de cambio, sin que seas capaz de evitarlo, lee con atención las líneas que vienen a continuación; es posible que entiendas mejor tu problema y puedas llegar a prevenirlo, evitando más de una situación desagradable o incluso peligrosa. Por otra parte, los centros de donantes de sangre, probablemente, te agradecerán no tener que perder otro "cliente" más.


¿Qué es el síncope reflejo o neuromediado y cuántos tipos existen?

El síncope es la pérdida súbita, breve y transitoria del estado de conciencia con incapacidad para mantenerse en pie y ausencia del tono postural, debido a una disminución en la perfusión cerebral global. El síncope reflejo o neuromediado es el más frecuente de las causas de desmayo.


















Según qué lo ocasione se clasifica en:

- S. Vasovagal (lipotimia o desmayo común). Supone el 75% de todos los casos. Se produce cuando a una emoción como la ansiedad, la depresión, el miedo o el estrés se le añade un factor desencadenante, como puede ser una extracción de sangre. Se origina al estimular el nervio vago, lo que ocasiona una reducción de la frecuencia cardiaca, una dilatación de los vasos sanguíneos y una disminución de la presión sanguínea, lo que a su vez impide que llegue suficiente sangre al cerebro. Suele durar entre veinte segundos y un minuto y la recuperación es espontánea. En la mayoría de los casos no reviste gravedad alguna ni está asociado a ninguna otra enfermedad. 

- S. Situacional. Se da en determinadas situaciones donde hacemos fuerza aguantando la respiración, como en la defecación (más frecuente en hombres) o en la micción (más común en mujeres), pero también en la deglución, tosiendo, estornudando o riendo intensamente.

- S. Carotídeo. Es más frecuente en personas mayores. Se produce al presionar el cuello: al afeitarse, al ponerse la corbata, al apretarse los botones de la camisa o girando la cabeza.